¿Hasta dónde hemos llegado en la creación de vida artificial?

De acuerdo, no soy biólogo y, por lo tanto, no puedo responder esto desde el punto de vista de la “clonación”. Pero soy ingeniero de impresión y una de las tecnologías recientes que ha despertado mi interés y que se relaciona directamente con su La pregunta es la impresión 3D, o en este caso, más específicamente, la bioimpresión.

La tendencia de la bioimpresión está impulsada por tres factores: impresoras más sofisticadas, software CAD refinado y avances en medicina regenerativa. Los científicos están cada vez más interesados ​​en el campo: de 2008 a 2011, el número de artículos científicos que hacen referencia a la bioimpresión casi se triplicó.
Las impresoras Bio 3D funcionan de la misma manera que las impresoras 3D tradicionales: el tejido se imprime capa por capa. Una vez que la impresora coloca una capa de celdas, sigue una capa de hidrogel que funciona como material de andamio y se repite el proceso. Cuando las células se fusionan, el hidrogel se elimina para crear material hecho completamente de células humanas. El material luego se mueve a un biorreactor donde el tejido continúa creciendo hasta su forma final.
La impresión 3D ya se ha utilizado para crear prótesis personalizadas, huesos humanos y tejidos humanos. Por ejemplo, LayerWise, un fabricante belga de piezas de metal, imprimió con éxito un hueso de la mandíbula en 2012. La mandíbula artificial se implantó en un paciente de 83 años. La empresa Organovo, con sede en San Diego, imprime con éxito pequeños fragmentos de vasos sanguíneos o tejido hepático. Aunque los mini-hígados tienen medio milímetro de profundidad y 4 milímetros de ancho, pueden realizar la mayoría de las funciones del órgano real. El objetivo final de Organovo es crear estructuras de tamaño humano adecuadas para el trasplante.
Actualmente, el mayor desafío en la bioimpresión 3D es producir redes ramificadas más grandes de vasos sanguíneos para nutrir órganos complejos. Stuart William, director ejecutivo y científico del Instituto de Innovación Cardiovascular (EE. UU.), Sugiere que los científicos podrán imprimir corazones completamente funcionales de las propias células de un paciente dentro de 10 años. Ya se han dado los primeros pasos: en la primera mitad de 2013, los investigadores imprimieron e implantaron una porción de un corazón y vasos sanguíneos en ratones.

Entonces, con los dedos cruzados, llegará el día en que los trasplantes de otro ser humano ya no serán necesarios.

¿Vida artificial o sintética ? Hay una diferencia inherente. La vida artificial son sistemas robóticos que cobran vida, lo cual es discutible ya que no están realmente vivos. No estoy muy seguro de la parte de la vida sintética, pero creo que hubo una investigación que vio cómo las células biológicas sintéticas se fabricaban y mantenían con éxito los procesos de mantenimiento de la vida.