¿Podemos construir un órgano biónico para el lenguaje?

Respuesta corta: no. No podemos hacerlo por el momento. Tampoco estamos cerca de él. No entendemos cómo funciona el lenguaje. Entendemos más de lo que solíamos, y estamos aprendiendo más cada día, pero hay grandes extensiones del sistema sobre las cuales no tenemos absolutamente ninguna pista.

No tenemos ninguna razón particular para pensar que sea imposible, pero tampoco está del todo claro que sepamos lo que significaría. El cerebro no es una computadora en la que conectas cosas. Si bien hay algunas piezas particulares que parecen desempeñar papeles cruciales en diversas funciones, están intrincadamente conectadas al resto del sistema. Es muy poco probable que podamos, incluso en teoría, elegir una parte e implantarlo en otra cosa. Tendría que cargar todo, lo que sería como tratar de convertir una hamburguesa en un Ferrari quitando la hamburguesa y reemplazándola con el Ferrari.

El lenguaje no es solo una actualización del sistema cerebral. Está entretejido a través de todo el asunto. Es concebible que algún día podamos descubrir suficientes conexiones que podamos encontrar fragmentos comparables entre algunos animales no humanos y tratar de improvisar los fragmentos más específicamente lingüísticos. Sin embargo, no comenzaría a hacer planes para preguntarle la opinión de su perro sobre qué cortinas de color debe comprar.