Realmente me ayudó a ser más productivo. Comencé a hacer mucho más cuando siempre tenía mi lista de tareas conmigo y podía marcar una tarea tan pronto como la completaba, así como ver lo que tenía que hacer a continuación, y qué más había en mi calendario para el día. Otras cosas, como tener una lista de compras siempre a mano, hicieron que fuera tan fácil hacer cosas que nunca me hubiera molestado antes en papel.
Tener acceso a la información en cualquier lugar es otra gran ventaja. Soy el tipo de persona que cuando no sé algo, lo busco. Antes de los teléfonos inteligentes, si estaba en movimiento, eso no podría suceder hasta que llegara a casa, incluso si lo recordaba. Ahora es solo cuestión de segundos, en cualquier lugar donde se encuentre, y puede obtener la respuesta a casi cualquier pregunta o encontrar cualquier hecho.
Tener toda mi música y una colección de juegos en mi teléfono significa que cada vez que me aburriría, al menos podría estar algo entretenido. Un simple paseo por la cuadra o esperar en una fila puede ser mucho más agradable cuando puedes escuchar música en el proceso. Y tener música y una cámara significa menos dispositivos para transportar.
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Obviamente hay mucho más, mapas, cámara, otras aplicaciones, infinitas posibilidades, pero esas fueron las cosas más importantes para mí.
