Por definición, no, no es necesario que el sistema esté alojado solo en los servidores del proveedor de SaaS.
Una de las ventajas clave de un sistema SaaS es que el sistema se implementa solo en los servidores del proveedor, lo que le da al proveedor un control total sobre la experiencia del usuario, así como la seguridad y el mantenimiento.
Si el sistema SaaS se implementa dentro de la red de un cliente en particular, entonces será necesario establecer un acceso especial para permitir el mantenimiento y el soporte, que es una sobrecarga definitiva.
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Debido al trabajo adicional involucrado, este tipo de acuerdo generalmente solo se realiza cuando el cliente está dispuesto a pagar más cada mes (o una tarifa de instalación) y celebrar un contrato a más largo plazo.
Una razón por la que un sistema SaaS generalmente se puede implementar con relativa facilidad en otros servidores (aparte de la implementación principal), es que el sistema se diseñará de tal manera que se pueda iniciar fácilmente en una máquina nueva. Esto es en parte para facilitar que los desarrolladores configuren una copia local para desarrollo / prueba, pero también para facilitar una implementación más sencilla.
Como tal, los principales impedimentos para implementar el sistema dentro de la infraestructura de la empresa de un cliente serán políticos, financieros o simplemente si el proveedor de SaaS no está dispuesto a seguir ese camino.
